jueves, 27 de marzo de 2014

El gran Gatsby: Su historia (The great Gatsby) (2000) - Robert Markowitz

Sinopsis: Ambientada en Nueva York y Long Island en los años 20. Jay Gatsby y Daisy Buchanan son dos jóvenes acaudalados destinados a enamorarse. Pero su entorno social, de estrictas convicciones, será el principal obstáculo a su tormentosa relación.

Más detalles/información (Click):
Crítica: Todavía peor. Si cabe.
Por mucho telefilm que sea esto... por aquí no paso. De hecho, el concepto "telefilm" nunca ha sido sinónimo de mala calidad. Han habido películas de sobremesa realmente buenas. Y películas de un presupuesto mucho más limitado e infinitamente mejores. Pero por aquí me niego a pasar. "El gran Gatsby" para mí nunca ha sido nada especial, ni nada memorable, y ni si quiera nada para pasar un rato entretenido.
Técnicamente tampoco eran una maravilla, y en cuanto a guión mucho menos.
El caso es que en "El gran Gatsby: Su historia" todo eso se agrava. Y no solo todo lo mencionado, sino más cosas aún.
Empezando por el reparto. Un reparto donde nadie pega en su papel ni con cola extra-fuerte, y donde ningún actor ni actriz se diga a actuar bien. Con una excepción: Paul Rudd. Paul Rudd queda perfectamente -teniendo en cuenta que es una película para ver un domingo cuando no tienes nada que hacer- en su papel de Nick Carraway, y actúa de correctamente. Y tal vez ese actor es lo mejor del film. Mientras tanto, tenemos un Toby Stephens que hace de un patético Jay Gatsby, y donde podemos apreciar que el ego lo tiene en las nubes.
Aunque la palabra "patético" se queda corta.
Y en cuanto al resto: o actúan pobremente, o sobreactúan patéticamente, o transmiten lo mismo que un ladrillo: absolutamente nada.
Y de la dirección, por parte de Robert Markowitz, se podría decir que es muy mejorable. Markowitz no se esmeró demasiado.
Todo es mejorable, hasta en las cosas más simples y en los detalles más obvios.
Y el guión lo mismo de siempre. Correcto, pero con una historia muy plana, sosa, aburrida y sin interés alguno, desarrollada de la forma más simple posible.
Sin embargo, y menos mal, no todo es malo o negativo.
La música es correcta, y la escenografía, para el presupuesto, está bastante bien. Pero eso no es suficiente para aprobarla. De hecho, no se suficiente ni para darle una puntuación que roce el aprobado.
Vuelvo a repetir que, los telefilms, por poco presupuesto y por el hecho de que no hayan sido destinados a ser recordados para siempre, no han tenido nunca por qué ser malas películas.
De hecho, cuando veo un film de esta categoría nadie se espera una obra maestra, y eso de las expectativas ayuda bastante. Y debo decir que hay películas de ese tipo mucho mejores. Esta, ni entretiene, ni engancha, ni da motivos para seguir viéndola. Es más bien todo lo contrario: aburre en cantidades inmesurables, no engancha en ningún momento y los motivos que da es para quitarla y no perder más el tiempo.
Con nada destacar, pero con todo para echarle en contra, tenemos una película más de esta saga que, en mi opinión, solo sirve para perder el tiempo y echarse a dormir.
Nada más que decir.

Mi nota: 3,2 sobre 10.














No hay comentarios:

Publicar un comentario